Nace tu bebé.

Y naces tú como madre.

Y sabes que irás aprendiendo día a día a ser mejor para ellos.

Y sientes que cada minuto vale la pena vivirlo.

Dejo para más adelante toda la parte biomecánica que podemos abordar tras el parto y cómo la fisioterapia puede ayudar a sentirnos un poco más nosotras. Quiero centrarme ahora en ese primer momento.

Ese despertar como mami al mundo que te hace sentir el mayor amor y a la vez la mayor soledad imaginada.

Confía en tu intuición, busca ayuda y apóyate para vivir ese momento con toda la magnitud que merece.

Confía en tu intuición, busca ayuda y apóyate para vivir ese momento con toda la magnitud que merece. En mi caso, fue recuperar mi parte profesional la que me abrió la puerta a la magia de ser madre.

Y quiero decirte como fisioterapeuta, como mujer, como amiga, como madre, como persona,  TODO SIEMPRE MEJORA.

Decía Nelson Mandela “Nada dice más del alma de una sociedad que la forma en que trata a sus hijos”. Y humildemente quisiera añadir…y  a sus madres.

Nada dice más del alma de una sociedad que la forma en que trata a sus hijos”

Entiendo que la maternidad es una experiencia única y maravillosa que muchas mujeres anhelan, pero también sé que no todas las mujeres pueden concebir de manera natural. Si estás en esa situación, te invito a explorar opciones de fertilidad que te permitan cumplir tu deseo de ser madre. Si estás interesada en conocer más sobre estas opciones, te recomiendo que visites a Beatriz Méndez del Rio, gran profesional especializada que puede brindarte información valiosa y apoyo emocional en este camino.

“La maternidad es la mayor felicidad que puede experimentar una mujer, pero también es un acto de coraje, paciencia y sacrificio”. – Elizabeth Stone.

Artículo realizado por Silvana Salgado